DEPORTE
INFANTIL
Existe una necesidad por parte de padres y profesionales de fomentar la actividad física en niños y adolescentes, lo que supone una mayor participación en deportes individuales y de equipo. A pesar de que el objetivo principal es mantenerse en forma y disfrutar, en muchas ocasiones esto no es así y se producen lesiones que, siguiendo unas recomendaciones básicas pueden evitarse.
Todos los deportes suponen un riesgo de lesión, ya sean individuales o en equipo, pero en éste último y en aquellos con mayor contacto entre los jugadores, como fútbol, baloncesto o balonmano, hay más posibilidades de que se produzca una lesión traumática.
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Muchas de estas lesiones se producen en ligamentos, tendones y músculos. El exceso de ejercicio también puede producir fracturas por estrés. Además, los especialistas de
Si un niño en edad de crecimiento se queja de un dolor localizado en un hueso, debería ser examinado por un médico, incluso si se observa una mínima inflamación o una limitación en el movimiento.
Las lesiones deportivas más frecuentes son torceduras y esguinces que afectan a ligamentos y músculos, así como fracturas óseas por estrés causadas por una presión anormal sobre tendones, articulaciones, huesos y músculos.
Para reducir el riesgo de lesiones se aconseja:
1. Dias de descanso: Es necesario incluir dentro de la planificación algún dia libre para permitir la recuperación del cuerpo.
2. Utilizar el equipamiento adecuado: Se recomieda utilizar una equipación específica para cada deporte, ya sea casco, rodilleras, coderas, gafas de protección o ropa específica. Los deportístas jóvenes no deben asumir que al utilizar esta protección se pueden realizar actividades más peligrosas o arriesgadas, o que la no utilización de la misma auenta la popularidad o no utilizarla por estética
3. Fortalecer los músculos: Es necesario realizar un calentamiento previo al ejercicio, fortaleciendo y movilizando la musculatura y articulaciones más implicadas en el deporte que se va a practicar.
4. Aumentar la flexibilidad: los ejercicios de estiramiento antes y después de la práctica deportiva aumentan la flexibilidad y disminuyen las posibilidades de contracturas musculares.
5. Utilizar la técnica apropiada: el conocimiento y automatización de la técnica deportiva nos ayudará a realizar una práctica deportiva basada en la economía del esfuerzo y en el aumento de la eficiencia deportiva.
6. Descanso durante la práctica deportiva: los periodos de descanso durante el entrenamiento y las pruebas deportivas pueden reducir las lesiones y evitar los golpes de calor, así como permitirán una recuperación muscular activa que permitirá volver a la práctica deportiva cargado de energía.
7. Jugo seguro: se debe informar y reforzar el seguimiento de las reglas de juego para evitar fomentar la competitividad sana.
8. Ante el dolor, parar la actividad: sea durante el entrenamiento o cuando haya comenzado el juego o la actividad deportiva, el dolor nos indica que hay que descansar y debe ser examinado por un profesional.
9. Evitar las lesiones por calor: La hidratación es fundamental, antes durante y despues del ejercicio. Se debe disminuir o dejar de realizar prácticas o competiciones deportivas durante los periodos de mayor calor o humedad. En verano se recomienda dejar la práctica deportiva para primera o última hora del dia donde el calor no es tan nocivo.
10. Cuidar el aspecto emocional: la presión por ganar puede producir estrés emocional en los menores. En el ejercicio y deporte en niños y adolescentes debe valorarse el esfuerzo, la deportividad y la intencionalidad. Deben ser recompensados por esforzarse y por mejorar sus habilidades.
El objetivo principal de la actividad deportiva para los menores debería ser divertirse y aprender habilidades para la actividad física a lo largo de la vida. Entendiendo que el deporte nos ayuda a tener una vida saludable.
Ventajas
de la actividad física en la infancia
Practicar deporte es beneficioso para los niños:
1.- Aprenden a seguir reglas e instrucciones concretas.
2.- Se ven en la necesidad de abrirse a tener relaciones sociales, superando así la timidez. Aprenden a respetar al compañero.
3.- Mejoraan el conociiento de sus límites pudiendo así frenar sus impulsos excesivos.
4.- Aumentan sus habilidades motoras gruesas y mejoran el control de su cuerpo. Mejorarn tambien la coordinación y el equilibrio
5 .- Favorecen el crecimiento de sus huesos y músculos.
6 .- Se puede corregir posibles defectos físicos. Encaminando una buana práctica deportiva a cada situación motora específica.
7.- Potencian la creación y regularización de hábitos fomentando la constancia y la disciplina.
8.- Desarrollan su placer por el movimiento y el ejercicio.
9.- Estimulan los hábitos de higiene y la autonomía personal en el aseo.
10.- Mejoran su salud, ánimo y rendimiento escolar.
“La actividad física hace que el cerebro libere endorfinas. Estas sustancias químicas provocan una sensación de bienestar. Se ha demostrado que los niños que practican deporte son más sanos, felices y tienen mejor rendimiento académico”
Lidia Parra Sánchez
Fisioterapeuta pediátrica. Terapeuta Bobath.
Reff bibliográficas web.
http://redsalud.uc.cl/ucchristus/MS/RevistaSaludUC
www.infosalus.com/salud-bienestar
https://www.cfisiomad.org
www.aap.org